Más allá de la adquisición de conocimientos, hablamos de Aprendizaje cuando se es capaz de llevar ese conocimiento a situaciones cotidianas de manera habitual. Es decir, habría aprendizaje no sólo cuando se ha logrado el conocimiento o la habilidad asociada, sino cuando lo transformo en acción que forma parte de mi patrón de comportamientos permanentes. De esta manera adquiere valor el proceso de entrenamiento y se podrá ver reflejado de manera eficiente en resultados específicos.